Blas Jesús Imbroda, decano del Colegio de Abogados de Melilla, presenta su candidatura a la Presidencia del CGAE

Blas Jesús Imbroda, decano del Colegio de Abogados de Melilla, ha anunciado su candidatura para presidir el Consejo General de la Abogacía Española (CGAE), sumándose así a otros aspirantes como Rafael Massieu, decano del Colegio de Abogados de Las Palmas de Gran Canaria, y Salvador González, decano de la Abogacía de Málaga. Este movimiento se produce tras la decisión de la actual presidenta, Victoria Ortega, de no optar a un nuevo mandato. También competirá por el cargo la exconsejera del CGAE, Carmen Pérez Andújar. Las elecciones están programadas para el próximo 28 de junio.

Un decano con trayectoria consolidada

Imbroda lleva 23 años al frente del Colegio de Abogados de Melilla, al que ha transformado profundamente, posicionándolo como una de las corporaciones de mayor prestigio y la institución civil más influyente en la ciudad autónoma. Además, es socio director de Bufete Imbroda Abogados, una firma legal de referencia en Melilla.

El decano expresó su motivación en una entrevista con Confilegal: «Me presento con humildad y con ilusión. He trabajado intensamente en el CGAE desde que soy decano. Mi objetivo es que todos los abogados colegiados sientan el Consejo como una institución a su servicio, con proyectos claros y muchas ganas de trabajar».

Experiencia en el CGAE y compromiso con los derechos humanos

Con más de dos décadas de experiencia en el CGAE, Imbroda ha desempeñado roles clave, desde el impulso a la formación y la innovación tecnológica hasta su actual presidencia de la Subcomisión de Extranjería y Protección Internacional, cargo que ocupa desde 2016.

Reconocido por su defensa de los derechos humanos, Imbroda ha liderado iniciativas de gran alcance, como su papel en el caso que llevó al presidente venezolano Nicolás Maduro ante el Tribunal Penal Internacional. También se ha pronunciado de forma contundente sobre conflictos internacionales, como en marzo de 2022, cuando calificó las acciones de Rusia en Ucrania como crímenes de guerra.

«La defensa de los derechos humanos y de los más vulnerables es el alma de la abogacía», afirmó con firmeza, dejando clara su visión de la profesión y de los valores que guiarían su liderazgo en el CGAE.